Turismo

Escapada a Lanzarote

Isla negra y desértica, sí, pero preciosa. Sus paisajes únicos enamoraron a artistas tan dispares como César Manrique, Saramago o Almodóvar. Si quieres saber por qué, lánzate a recorrerla: merece más de un viaje.
PARA DOS 
Vistas Románticas y buena mesa.
Hay lugares en Lanzarote que parecen especialmente diseñados para ser escenarios de una declaración de amor. Como el Mirador del Río, donde se contempla la isla de La Graciosa al aire libre —desde una terraza vertiginosa — o sentado tras las cristaleras de un pintoresco bar excavado en la roca (entrada: 4,50 €). Para prolongar algo más ese momento mágico (y exprimir las panorámicas sobre el vecino archipiélago Chinijo), desde el mirador toma la carretera que parte a mano derecha y que discurre sinuosa por encima de los Riscos de Famara; es una ruta espectacular, al más puro estilo road movie, que pide ser realizada con pausa y cámara en mano. Si el tiempo acompaña, que suele hacerlo, un lugar idóneo donde pedir mesa para dos es Puerto Calero. Aquí se encuentra el restaurante Amura, ubicado en un coqueto edificio de estilo colonial. Siéntate en su terraza junto al mar y pide un buen sancocho de cherne con papas o un arroz caldoso de bogavante, y, sobre todo, deja que te recomienden un buen vino de malvasía para acompañar.
Este preciado elixir canario proviene de la zona de La Geria, donde un paisaje aparentemente yermo fue convertido en un cultivo de vid extraño y próspero, gracias a la tenacidad e imaginación de los campesinos locales. El escritor y premio Nobel José Saramago, vivió en esta zona vinícola hasta su muerte, el pasado año 2011.
SI AMAS LA NATURALEZA 
La herencia volcánica.
Uno de los artífices de que en Lanzarote haya menos cemento que en el resto de las Canarias fue el arquitecto César Manrique. Luchó sin descanso para lograr la preservación de la isla y consiguió que fuera declarada “de alta protección ecológica”. Se propuso convertirla “en uno de los lugares más hermosos del planeta” y conjugó con extraordinaria originalidad el arte y la naturaleza.
Los Jameos de Agua —su primera intervención artística— se localiza sobre el paisaje quemado que creó la erupción del volcán de la Corona. Los perfiles pétreos del lugar acogen un auditorio (que aprovecha el interior de una gruta volcánica) y un curioso restaurante que te recomendamos visitar de noche (abre los martes y sábados hasta las 24 h. Entrada 8 €). El diálogo creativo de Manrique con la naturaleza dio otros frutos, como el Jardín de Cactus, que ideó para recuperar una vieja escombrera de Guatiza (entrada: 5 €), o la que fuera su vivienda particular, hoy sede de su Fundación.
Más allá de la intervención de Manrique en Lanzarote, la fuerza de la naturaleza en esta isla, azotada por el viento y el rugir de la tierra, regala al visitante otros lugares impresionantes. En la playa del Golfo, por ejemplo, hay un mirador en los acantilados desde donde podrás apreciar el contraste entre el azul marino, el negro de la arena y el verde intenso de la laguna de los Clicos. El lugar es tan fotogénico que hasta Pedro Almodóvar lo escogió para sus Abrazos rotos.
Dos paisajes más con la herencia volcánica como protagonista: Los Hervideros, una zona de cuevas submarinas creadas por la erosión del agua en la lava; y el Parque Nacional de Timanfaya y Montañas del Fuego, con sus mares de arena quemada y multicolores, producto de la más reciente de las erupciones volcánicas, entre 1730 y 1736.
ESPECIAL AVENTUREROS 
Bajo el mar y sobre las olas.
Cierran compuertas, la nave empieza a descender, la luz adopta un tono azulado y a 35 metros bajo el nivel del mar se descubre un nuevo mundo poblado por meros, rayas, barracudas y hasta barcos hundidos. En Puerto Calero, la inolvidable experiencia de poder dar un paseo por el fondo del mar a bordo de un submarino dejó de ser exclusiva para las fuerzas militares y los protagonistas de las novelas de Julio Verne gracias a la empresa Submarine safaris.
Pero también hay quien quiere mojarse. Lanzarote —con ese clima benigno que permite el baño a lo largo de todo el año— atesora bajo el Océano Atlántico sobrecogedores paisajes que un día también modeló la lava y que hoy son hogar de especies marinas difíciles de ver en otros fondos. Por ello, no es de extrañar que las aguas que rodean Lanzarote —también Reserva de la Biosfera por la UNESCO— sean una mina para los aficionados al buceo. Más aventura acuática, esta vez sobre la superficie marina, se concentra en la pintoresca playa de Famara, siempre azotada por el viento y donde se reúnen los aficionados al surf y al kitesurf. No debe de ser fácil concentrarse sobre las olas teniendo como telón de fondo los riscos de Famara —acantilados de 500 metros de altura—, especialmente a última hora de la tarde, cuando el sol los tiñe de un intenso color rojizo.
GUÍA PRÁCTICA
Cómo llegar:
-La compañía Vueling tiene rutas directas a Lanzarote desde Barcelona y Bilbao (4 o 5 vuelos semanales) desde 49 € por trayecto. Desde Madrid u otras ciudades, Iberia cuenta con varios vuelos diarios.
Dónde dormir:
-Por menos de 90 €. Caserío de Mozaga. En San Bartolomé. Finca rural del s. XVIII perfecta para parejas que busquen descanso y desconexión.
-Por menos de 60 €. Barceló Lanzarote Resort. En Costa Teguise y a 4 km de la capital, Arrecife. En su web publican periódicamente ofertas y descuentos.
-Por menos de 40 €. Bungalows Atlantic Gardens. En Playa Blanca, al sur de la isla. La opción de sus apartamentos es sin duda la mejor si viajas con niños.
Comer por menos de…
-30 €. Patio Canario. Plaza Pueblo Marinero, Costa Teguise; telf.: 928 34 62 34. Especializado en pescado fresco, es ideal para probar los más típicos de aquí, como la morena o el cherne.
-15 €. La Era. Barranco, 3, Yaiza. Es un restaurante emblemático, cuyo edificio histórico fue de los pocos en salvarse de la erupciones volcánicas que asolaron Lanzarote entre 1730 y 1736. Se basa en el recetario isleño y tiene platos de obligada degustación, como el puchero canario o el bienmesabe.
-10 €. Bodega Barreto. Ctra. del Centro, 64, Masdache; telf.: 687 88 15 09. Sus vinos se comercializan bajo la marca El Campesino. La familia Barreto es una de las principales productoras de vino con Denominación de Origen Lanzarote.

Periodista.Editora marcelafittipaldi.com.ar. Ex-editora Revista Claudia, Revista Telva España, Diario La Nación, Diario Perfil y revistas femeninas de la editorial

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