Alta Costura, al mejor postor

El próximo 24 de noviembre, el Hotel Drouot de París será testigo de una subasta muy especial. Las prendas de la colección de Alta Costura de la temporada otoño/invierno 85/86 que Christian Lacroix creó para el diseñador y perfumista Jean Patou serán puestas a la venta, para deleite de coleccionistas y amantes de la moda.

Tras graduarse en la École du Louvre, en 1981, Lacroix comenzó a trabajar para la casa de modas fundada por Patou. Allí, el joven diseñador dio forma a sus primeras colecciones, marcadas ya con el inconfundible chic francés y un estilo muy personal que eleva al máximo la feminidad de la mujer.

Ahora, esta subasta, que se realizará bajo la supervisión de Charlotte Van Gaver, de Chayette&Cheval, y la experta Pénélope Blanckaert, saca a la luz aquellas piezas que marcaron los primeros pasos de la carrera de Lacroix. Vestidos, abrigos, capas, caftanes, túnicas o chaquetas de ricos bordados, todos ellos procedentes de coleccionistas privados, vuelven a recuperar el esplendor de épocas pasadas. Junto a estas prendas, además, se subastará una colección de joyas que también nacieron de la imaginación de Lacroix.

En 2010, y también en el mismo lugar, se celebró una subasta muy similar. Entonces, los asistentes pujaron por la última colección que Christian Lacroix diseñó para Jean Patou en la primavera de 1987, después de lo cual emprendió su camino en solitario y creó su propia firma. En aquella ocasión, según informó la casa de subastas, se alcanzó una venta por valor de 168.462 euros.