
Parrilla La Cabrera por Mariano Wullich
Dejen de mentir
(Parrilla La Cabrera)
Después de haber leído notas y más notas fui a comer a la “mejor parilla argentina” que, según los analistas gastronómicos, es La Cabrera.
¿Cómo nos pueden indicar a los que sabemos de carne y campo en donde se come la “mejor carne del mundo”? ¿Cómo tienen el tupé?
Hoy no voy a hablar de recetas, de platos recomendados ni de otras parrillas, sino referirme al falso mito. Y, lo voy a hacer de manera sintética.
La comida: la provoleta parece soufflé (5 puntos). En cuanto a la provoleta “completa” (con panceta), prefiero destruirme el hígado con otras cosas más espirituosas.
El chorizo en herradura, bueno (6.50 puntos) y la morcilla, normal. Las mollejas, lo mejor: un 8.50. Vamos con las carnes. La bondiola de cerdo tierna como en cualquier lado, el ojo de bife, el bife de chorizo y la entraña, normalitos (6.50).
Las salsas muy bien, aunque cuando la carne es buena no hacen falta. La ensalada como en cualquier lugar y las papas fritas decididamente malas es decir ni rubias ni naranjas, con gusto a humedad (3).
De los postres no opino porque no sé. Sí del lugar. Pésima acústica, recargado, con individuales de papel y mozos que hacen chistes (ninguno podrá ser ni el tataranieto de Landriscina) y para peor en voz alta.
¡Señores, quieren saber lo que es un asado, vengan al campo!
Dejémonos de mentir.
Mariano Wullich