Marion Cotillard: «Me fascina la idea de interpretar a un hombre»

Luc y Jean-Pierre Dardenne con Marion Cotillard en Cannes

Si Cannes se rindió ante Marion Cotillard hace dos años, cuando desembarcó en la sección oficial con «De óxido y hueso», en este 2014 el festival la ha convertido en su reina. Tanto que en la rueda de prensa de la presentación de su película, los hermanos Dardenne -con dos Palmas de Oro, nada menos- han quedado en un discretísimo segundo plano. Todas las preguntas y toda la atención era para la protagonista de «Deux jours, une nuit», un drama laboral -seguro que esto les suena- en el que una empresa organiza una votación despiadada: o la plantilla renuncia a un bonus de 1.000 euros o el personaje de Cotillard se queda sin trabajo.

«Siempre había soñado con trabajar con estos directores», decía Cotillard al referirse a los cineastas que pusieron en pie «El hijo» o «Rosetta». «Quería que me guiaran hacia los detalles más profundos de sus personajes. Desde fuera siempre tuve la impresión de que conllevaríamucho trabajo alcanzar la perfección que ellos alcanzan en sus películas. Lo raro es que hablaban de los espectadores durante los ensayos. A veces, en los rodajes, no te permiten ni siquiera hablar de los espectadores, no sé por qué. Pero Jean-Pierre y Luc hacen sus películas para la audiencia, y siempre me sorprende el resultado».

«Me encantaría actuar en una comedia»

Jean-Pierre Dardenne, con su sonrisa siempre entrañable, añadía: «Nosotros hablamos de la gente pequeña, con sus pequeñas alegrías y sus pequeños sufrimientos. Y también sus grandes esperanzas. Son la gente que conocemos, y sentimos que a través de sus historias cotidianas alcanzamos lo universal». Los hermanos conocieron a Cotillard durante el rodaje de la última cinta de Jacques Audiard, que produjeron, y en seguida conectaron con la actriz. «Mi hermano y yo», explicaba Luc, «hablamos con ella del personaje, le dijimos que queríamos trabajar con ella, y ella dijo lo mismo. Así que cambiamos el guión pensando en Marion».

La cinta, en la que vemos cómo el personaje de Sandra va convenciendo a sus compañeros de trabajo de que voten por ella y no por el bonus, conllevó un duro proceso de ensayos. «Hay muchas cosas que me gustaría intentar», contestaba Cotillard a una pregunta sobre los retos que tiene por delante. «Me encantaría actuar en una película de acción, en una comedia, nunca he hecho una película así. Y me encantan como espectadora. Espero tener la suerte de tener esa experiencia. Y me fascina la idea de interpretar a un hombre, porque me parece completamente imposible, la idea es excitante».