Salud

Lepra: la importancia de un diagnóstico precoz

El Día Mundial de la Lepra se celebra el último domingo de enero de cada año con el objetivo de crear conciencia sobre la enfermedad y reducir el estigma contra quienes la padecen.

De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la lepra ha afectado a más de mil millones de personas en todo el mundo, especialmente en regiones tropicales y subtropicales.

Según la entidad, los síntomas de esta enfermedad pueden mostrarse en un año, pero a veces tardan hasta 20 o incluso más en aparecer. Es causada por la bacteria Mycobacterium leprae, también conocida como bacilo de Hansen, que se multiplica muy lentamente en el cuerpo y se transmite principalmente a través del contacto cercano y prolongado con personas no tratadas que están infectadas, principalmente mediante la exposición a fluidos de la nariz y la boca.

Para la Dra. Silvina Ivalo, infectóloga de DIM Centros de Salud, “no se sabe exactamente cómo se transmite entre las personas. Los científicos piensan que podría ser a través de las microgotitas que una persona con la enfermedad de Hansen elimina con la tos o el estornudo, y así infectar a una persona sana. Se necesita un contacto cercano y prolongado por meses con una persona infectada y sin tratamiento para adquirir la enfermedad. Las personas no podemos adquirir lepra por contactos casuales con personas infectadas si las abrazamos o les damos la mano, nos sentamos al lado de ellas en una sala de espera, en un transporte o nos sentamos en la misma mesa a compartir una comida”.

La profesional agrega que “la población más afectada son los varones adultos jóvenes y de edad media de 40 años. Aquellas personas que trabajan en tareas rurales presentan más frecuentemente esta condición en comparación con las que viven en zonas urbanizadas”.

Los síntomas que afectan principalmente a la piel, los nervios y las mucosas son:

  • Lesión grande y descolorida en el tórax
  • Manchas de piel descoloridas, generalmente planas, indoloras
  • Nódulos
  • Úlceras no dolorosas en las plantas de los pies
  • Hinchazón o bultos indoloros en la cara o los lóbulos de las orejas
  • Pérdida de cejas o pestañas
  • Entumecimiento de las áreas afectadas de la piel
  • Debilidad muscular o parálisis (especialmente en las manos y los pies)
  • Problemas oculares que pueden provocar ceguera (cuando los nervios faciales están afectados)
  • Manchas rojizo-oscuras en el tórax que son indoloras
  • Pérdida de tejido en el ala de la nariz
  • Hemorragia nasal
  • Pérdida de sensibilidad en los dedos de las manos y/o pies
  • Debilidad muscular y parálisis (especialmente de manos y pies)
  • Engrosamiento de los nervios (especialmente alrededor de las rodillas y a los costados del cuello)

En los estadios tempranos la enfermedad puede ser curada. Sin embargo, si no es tratada a tiempo, el daño en los nervios de manos y pies pueden provocar parálisis y la afectación de los ojos, e incluso ceguera. “La afectación es progresiva, y en etapas avanzadas los tratamientos antibióticos ya no son efectivos. El cuerpo puede sufrir deformaciones graves y mutilaciones por las lesiones”, agrega la profesional.

El procedimiento indicado, se basa en una terapia multidrogas. “El tratamiento efectivo debe administrarse lo más tempranamente posible, por lo que el diagnóstico precoz es fundamental en esta enfermedad. La terapia actual consiste en el uso de 2 o 3 antibióticos usados al mismo tiempo”, finaliza la infectologa.

Con el asesoramiento de la Dra. Silvina Ivalo,

Infectóloga de DIM CENTROS DE SALUD,

MN 86191 // MP 444316

Periodista.Editora marcelafittipaldi.com.ar. Ex-editora Revista Claudia, Revista Telva España, Diario La Nación, Diario Perfil y revistas femeninas de la editorial

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