Dejó un puesto gerencial en Laboratorios Bagó para apostar por su propia startup de ciberseguridad 

Si bien mucho se lee sobre la importancia de animarse a dar el gran salto, no existen tantos ejemplos de ejecutivos que se animen a hacerlo. Pedro Droven es una de las personas que  más saben sobre seguridad informática en nuestro país. Mientras estudiaba ingeniería en sistemas en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), ya había comenzado a desarrollar las áreas de seguridad de varias organizaciones.

Sin ir más lejos, en 2009 comenzó a diseñar un área dedicada a la seguridad en Walmart, debido a los requerimientos de Estados Unidos, cuando las empresas locales no solían, aún, contar con ello o en el mejor de los casos era un tema incipiente.

Años más tarde pasó a Cencosud, la empresa chilena controlante de Jumbo, Disco y shopping Unicenter, ya como Líder de Seguridad, y a cargo de proyectos grandes, no solo en Argentina sino también otros países de la región.

Siempre con la cabeza puesta en la prevención de fraudes y ataques informáticos, algo que fue creciendo con el correr de los años, Droven estuvo, tiempo más tarde, a cargo de la Seguridad informática en OCASA y, como parte de eso, como encargado del mantenimiento de diferentes verticales de la compañía logística.

De la corporación a la startup

Gracias a la experiencia que fue ganando en cada una de estas empresas, logró adquirir una visión 360 de los aspectos que tienen que ver con la seguridad en las organizaciones y los diferentes procesos necesarios para blindar sus sistemas y datos de valor.

Cuando ingresó a Laboratorios Bagó, mediando el año 2021, ya tenía en mente el poder brindar una solución que abarque todos los factores que inciden en los delitos informáticos. A lo largo de su carrera fue viendo cómo, a pesar de lo que las empresas invertían en sistemas más seguros desde el punto de vista de la robustez tecnológica, los ataques se seguían produciendo.

¿Por qué pasaba esto? Porque en más del 50% de los ataques a empresas, aprendió Droven, la clave no fue un sistema vulnerable sino el factor humano. Entonces se dio cuenta que la capacitación era trascendental, el punto esencial para poder frenar o, al menos, estar prevenidos de esos posibles ataques.

De esa manera, mientras se desempeñaba como Chief Information Security Officer, en Bagó, se ocupó de blindar la compañía, tanto desde el punto de vista de la robustez de los sistemas utilizados como de la cultura de prevención necesaria, entre los colaboradores, para disminuir o evitar las chances de recibir un ataque.

En paralelo, junto con otro analista en sistemas, Alan Burastero, y un Licenciado en Administración, Alejandro Melinsky, creó ZULA, una startup de ciberseguridad con una plataforma modular compuesta de varios productos, que se pueden activar o desactivar según el nivel de protección que requiera el cliente.

ZULA se caracteriza, entre otras cosas, por utilizar el gaming como herramienta para capacitar a los empleados de las empresas y con eso prevenir los ciberataques. Mediante diferentes competencias, se va poniendo a prueba a los colaboradores, quienes obtienen premios y mejores calificaciones, según sus respuestas.

Un salto premeditado

Lo cierto es que ZULA fue creciendo, de a poco, en paralelo con el desarrollo de Pedro en Laboratorio Bagó, y en enero de este año, ya sintió que estaban dadas las condiciones para dar el gran salto, o sea dejar la seguridad de la gran empresa para apostar por el crecimiento de su propia startup.

De esta manera, Pedro Droven renuncia a su puesto como Chief Information Security Officer (CISO) en Bagó, para asumir como Chief Technology Officer (CTO)  en ZULA Ciberseguridad.

La decisión ya estaba tomada hace meses, pero para llevarla a cabo de la manera más ordenada posible, Pedro se ocupó de buscar y proponer a la persona que lo iba a suceder en el laboratorio.

Con la incorporación de Pedro -que, como se mencionó, había sido uno de los fundadores pero no estaba en el día a día-  ZULA apunta a desarrollar sus planes de expansión local e  internacional, lo que le valió, por sus planes, el premio Supervielle Exporta a fines de 2024.

La empresa quiere fortalecer su presencia  en a Latam y Brasil, donde ya hay una base de clientes instalada.

“Hoy la mayoría de incidentes informáticos tienen el origen en el factor humano. La tecnología, en especial desde el advenimiento de la IA, evolucionó tanto que los delincuentes tienen cada vez más herramientas. Y la gente, que utiliza dispositivos para todos los momentos del día, está cada vez más expuesta”, señaló Droven, para luego agregar: “Por eso, entiendo que los temas de ciberseguridad deben atenderse con un complemento de inversión en equipos y mucha pero mucha capacitación”.

Por último, el especialista agregó: “El crecimiento de ZULA, en especial durante el último año, fue lo que determinó que me animara a dar el gran salto, sabiendo que siempre algún riesgo hay, pero que tanto nuestra especialización como el contexto nos dan el argumento para pensar que la ciberseguridad será, cada vez más, un elemento central de las empresas”.

Más info sobre ZULA en: https://zula.ar/