Mini Cooper S Caribbean 2018, el coche más cool del verano

BMW lanza al mercado una nueva edición del Mini Cooper. Azul turquesa como las aguas caribeñas, descapotable a cielo abierto, más cómodo y tecnológico, así es el nuevo El Mini Cooper S convertible Caribbean 2018.

Ha logrado que su imagen se asocie con las últimas tendencias. Conducir un Minies ser chic y/o cool. Además, la marca continúa con su guiño constante hacia su legión de fieles al llevar a su máximo extremo la personalización de cada vehículo, para dotarle de una mayor exclusividad. En la actualización del Mini Cabrio permanece la capota textil negra que se pliega en apenas 15 segundos pulsando un botón tanto en parado como si se circula por debajo de 30 km/h; pero ahora hace patria al introducir la Union Jack estampada en tonos grises. Patriotismo que se acentúa con la presencia de la bandera de Reino Unido también en las luces LEDtraseras.

Este es uno de los principales cambios del Mini Cabrio. Las luces. El interior de los faros y los pilotos varía su diseño e introducen los halógenos y LED. En el Cooper S esta tecnología añade las luces automáticas, que evitan que se deslumbre a los conductores que nos encontramos en sentido contrario; una función que opera siempre y cuando que la velocidad a la que se circule sea superior a 70 km/h. En materia de conectividad ahora ya ofrece a sus clientes el sistema de su matriz, BMW, con todos y cada uno de los servicios de atención al cliente del Mini Connected, que abarcan desde la búsqueda de un restaurante hasta la planificación de la mejor ruta.

Velocidad máxima: 230 km/H. Aceleración de 0-100 km/h. 7,1 segundos. Consumo combinado: 5.5 1/100km. Emisiones: 126 g/km. Precio: 35.850 euros.

Tres modos

En cuanto a los motores, Mini asegura que ya tiene todas las motorizaciones homologadas para la nueva normativa de emisiones europea, llamada WLTP, que entra en vigor el próximo 1 de septiembre. La variante Cooper S con su motor de gasolina de 192 caballos asociado al cambio automático ofrece un perfecto equilibrio entre confort y deportividad. El conductor puede elegir entre tres modos de conducción: arranca siempre en Normal y con un botón situado en la columna central se cambia a Green, que sería el más ecológico o a Sport, el más agresivo. En este último, el ruido del motor se hace más grave, pero sin resultar bronco.

Es en este modo en el que la diversión para el conductor aumenta, tanto si se va a cielo abierto como capotado. Mini presume de que su tres puertas y el Cabriomantienen la esencia de sentirse al volante como en un kart. Hay que tener imaginación, porque la marca británica ha dotado de mayor confort a sus modelos, y eso lo agradecen nuestros riñones. No obstante, continúa siendo un pequeño muy divertido. En tramos sinuosos se puede hacer un paso por curva alegre sin perder rapidez aun en las lentas; y si se quiere mayor participación en la conducción, se pueden usar las levas del cambio situadas detrás del volante para subir y bajar marchas.

Motor: cuatro cilindros. 1998 cc. Turbocharger. Potencia 192 cv. 5.000-6.000 rpm. Transmisión automática 7 relaciones. Medidas: (largo/ancho/alto): 3.850/1.727/1.415 mm. Peso: 1.390 kg.

Si se circula por ciudad, el modo Green es necesario: aumenta el confort en los asfaltos irregulares y el motor relaja su empuje y entrega su potencia de forma más suave. Por cierto, que a cielo abierto, el habitáculo está bien insonorizado para las dos personas que van delante. Se mantiene una conversación a 120 km/h sin tener que elevar el tono de voz. Para los dos pasajeros de detrás se hace necesaria gorra, gorro, pañuelo, coleta o pamela. Si no, el pelo se convierte en un punzón para la piel de la cara.

Los asientos, deportivos y cómodos, cuentan con calefacción, pero se echa en falta estos días que sean ventilados, aunque los cabrios no son para el verano, sino más bien para primavera y otoño.