Bally confía sus gafas a Marcolin hasta 2023

La empresa italiana Marcolin ha sumado una nueva marca a su cartera. El histórico actor veneciano de la industria de las gafas ha obtenido la licencia exclusiva para la producción y distribución mundial de gafas de sol y oftálmicas de Bally. El acuerdo entrará en vigor a partir de 2019 por un período inicial de cinco años, con la posibilidad de prorrogarse por otros cuatro años.

La nueva colección se estrenará en Asia y, solo en una segunda fase, se distribuirá en el resto del mundo. «La decisión de presentar Bally en Asia es parte de la estrategia de concentración y de nuevas inversiones en este mercado, uno de los más importantes para el grupo Marcolin», dijo el CEO del fabricante de gafas, Massimo Renon.

La marca suiza de calzado y accesorios de lujo, que es propiedad del conglomerado chino Shandong Ruyi desde el pasado mes de febrero, que también incluye a otras marcas como SMCP (Sandro, Maje, Claudie Pierlot) y al grupo Trinity (Cerruti 1881, Kent & Curwen, Gieves & Hawkes), ha registrado un fuerte crecimiento en sus ventas en 2017, después de varios años de estancamiento, gracias al impulso del CEO Frédéric de Narp.

Además, los excelentes resultados registrados en la región asiática (según Reuters, más de la mitad de las ventas de Bally corresponden a clientes chinos) han llevado a ambas partes a elegir este mercado como el primer paso en el lanzamiento de la nueva colección. «La elección de Asia fue simple; es un mercado que le importa a Bally, así como el territorio de algunos de los clientes más exigentes y a la moda del mundo», comentó Frédéric de Narp.

Con una cartera de 28 marcas bajo licencia, que incluyen a Tom Ford, Roberto Cavalli, Atelier Swarovski, Tod’s y Emilio Pucci, Marcolin finalizó el año fiscal 2017 con 469,1 millones de euros en ventas. El grupo de Longarone ha firmado recientemente un importante acuerdo para desarrollar una empresa conjunta con LVMH: Thélios, que es propiedad en un 49% de Marcolin y en un 51% del gigante francés, se encargará primero de las gafas de Céline, antes de ampliar su cartera con otras marcas de lujo.