¡Stop al Lumbago!
25/06/2014
El lumbago es, sólo por detrás del dolor de cervicales y la hipertensión, el tercer problema crónico de salud que más se diagnostica en los españoles mayores de 16 años, según establece la Encuesta Europea de Salud en España, del Instituto Nacional de Estadística (datos de 2011). Plantarle cara es posible si tenemos en cuenta tres normas básicas: evitar coger grandes pesos, cuidar la higiene postural (corrígete a ti misma) y hacer ejercicios específicos. Toma nota.
DE QUÉ SE TRATA
Lumbago es el término coloquial de la lumbalgia (dolor en la zona lumbar de la espalda, entre el extremo inferior de las costillas y los glúteos). Se habla de lumbalgia aguda si dura menos de seis semanas y crónica si las supera. Puede deberse a problemas mecánicos (los más frecuentes) o inflamatorios en los músculos, los ligamentos o las articulaciones. Entre las causas de origen mecánico más comunes está tener la musculatura debilitada, la escoliosis (alteración de las curvas normales de la columna), la degeneración del disco intervertebral, la artrosis (desgaste de las vértebras), las fracturas por osteoporosis, etc.
INFLUYE EL ESTRÉS Y EL SEDENTARISMO
“Quienes realizan esfuerzos físicos, mantienen posturas forzadas, las personas con artrosis o escoliosis, o las que hayan sufrido algún tipo de traumatismo, fractura o padezcan hernia discal o inflamación de la columna (espondiloartritis) son las personas más proclives a padecerlo”, explica el doctor Eduardo Úcar, de la Sociedad Española de Reumatología. Pero también aquellas con estrés o ansiedad, así como las sedentarias, “que suelen sufrir a nivel no sólo lumbar, sino en toda la columna vertebral, y que toleran peor el dolor”.
DESDE LA INFANCIA
“La lumbalgia puede aparecer ocasionalmente desde la infancia, pero a partir de la tercera década de la vida su frecuencia aumenta”, explica el doctor. En los más jóvenes, lógicamente, suele deberse a esfuerzos, malas posturas, traumatismos, desviaciones de la columna y más raramente a infecciones en ella. “A partir de los 50 años, la causa más común es la artrosis o las fracturas por osteoporosis y, con mucha menos frecuencia, los tumores”, agrega el doctor .
EMPEORA ESTANDO DE PIE
El dolor por causas mecánicas suele agravarse al estar mucho tiempo de pie o mantener posturas incorrectas. Al tumbarse, generalmente mejora. Sin embargo, si es de origen inflamatorio, tiende a agravarse por la noche (suele despertar a la persona y obligarla a incorporarse de la cama). La actividad diaria, en lugar de empeorarlo, lo alivia (a veces desaparece).
¿En qué se diferencia de una ciática? Cuando el dolor sobrepasa la zona lumbar y llega hasta el talón o el pie (no se queda en las rodillas), descendiendo por la parte posterior o lateral del muslo, se trata de una ciática. Este problema generalmente se relaciona con una lesión en las raíces nerviosas que salen de la columna vertebral y ‘llevan las órdenes’ para contraer los músculos a las piernas a través del nervio ciático.
PAUTAS PARA EVITARLO
“En primer lugar, reposo, pero durante poco tiempo (no más de tres días). Luego, hay que comenzar a moverse, realizar actividades suaves, de forma progresiva y lo más pronto posible”, explica el doctor. En esta fase, suele ser eficaz aplicarse calor local varias veces y darse un masaje después (sobre todo, si notas alguna contractura). También puedes tomar analgésicos simples como el paracetamol, el metamizol o antiinflamatorios no esteroideos (consulta antes siempre co tu médico).
Si se trata de una lumbalgia crónica, los medicamentos cambian y, de nuevo, es el médico quien debe prescribirlos. Si ésta se acompaña de ansiedad o depresión, suelen recetarse fármacos específicos. Por otra parte, también ayuda practicar regularmente deporte (la natación, por ejemplo) y ejercicios concretos contra el lumbago, con los que, eso sí, hay que ser constante (realizarlos a diario o al menos cuatro veces a la semana).
EJERCICIOS ANTILUMBAGO
-Flexionar las rodillas: Tumbada boca arriba, flexiona las rodillas y llévalas -cogidas con las manos- hacia el cuello, empujando un poco. Repite el ejercicio 5 veces. Respira profundo al respirar.
-Avanzar los brazos: De rodillas, dobla la espalda y pega la frente en el suelo. Poco a poco, extiende hacia delante los brazos, sin llegar a que te molesten las lumbares. Bájalos -siempre pegados al suelo-. Hazlo 5 veces.
-Estirar la columna: Túmbate boca abajo y apóyate con la palma de las manos. Estira el cuello hacia el techo, sin notar tirante la espalda, y bájalo. Repite 5 veces.
EL EXPERTO OPINA:
El Dr. Eduardo Úcar, presidente de honor de la Sociedad Española de Reumatología (SER) nos aconseja ir al médico si aparece fiebre. “Para prevenir el lumbago, hay que vigilar la higiene postural (coger peso con la espalda recta, flexionando las rodillas y trasladarlo pegado al cuerpo); calentar antes de hacer deporte, evitar el sobrepeso y la obesidad y practicar ejercicio de forma regular (estirar la musculatura del tronco). Si durante una crisis no alivia guardar reposo o aparece malestar general, fiebre, pérdida de peso, persiste el dolor y se altera la sensibilidad, acude al médico. Y, mejor, no tomes fármacos sin consultarle”.
Marcela Fittipaldi
Periodista.Editora marcelafittipaldi.com.ar. Ex-editora Revista Claudia, Revista Telva España, Diario La Nación, Diario Perfil y revistas femeninas de la editorial
Más recientes