La maquilladora Bobbi Brown es la preferida de las famosas de Hollywood

Bobbi Brown solo desprende energía positiva y es «normal», el calificativo más difícil de alcanzar en estos tiempos y «a pesar de». A pesar de ser la creadora de la línea de maquillaje por la que suspiran todas las mujeres del mundo. A pesar de vender más de 24 millones de productos al año en 63 países. A pesar de eso y de mucho más. Porque a esta gran artista del maquillaje la fama no la ha cambiado nada. Gran ejemplo.

1- ¿Cuál es la noticia de la que le gustaría ser protagonista?

Más que de una noticia me encantaría poder conocer a la Reina de Inglaterra, Isabel II.

2- Si tuviera que formar un dueto, ¿con quién lo formaría?

Pharell Williams.

3- Una imagen de su infancia.

La casa familiar de tres habitaciones en la que viví con mis padres en Chicago.

4- Si se reencarnase, ¿qué preferiría ser hombre o mujer? ¿Por qué?

Sin duda mujer. Las mujeres son maravillosas. Buenas comunicadoras, líderes e innovadoras. Además ser madre es el mejor trabajo del mundo. Sin olvidar que podemos jugar con el maquillaje y eso es muy «cool».

5- ¿Cuál es la pregunta más ridícula que le ha hecho un periodista antes de hoy?

Me suelen confundir con el rapero Bobby Brown. Me he acostumbrado pero en los inicios de mi carrera tuve que aclararle a algún periodista que era una maquilladora profesional y no el rapero.

6- El fin del mundo a la vuelta de la esquina. ¿Qué es eso qué haría que nunca tuvo el valor de hacer?

Comer lo que no como habitualmente como pan blanco. Pienso que la belleza comienza con una alimentación sana y equilibrada por lo que tengo un estilo de vida muy saludable.

7- ¿Cuál es el peor defecto de los otros?

Las malas energías. Para mí es fundamental tener una actitud positiva ante la vida.

8- ¿Qué le falta para completar su vida?

Algunos centímetros de altura.

9- Enganchado a las redes de…..

Mi Iphone para recibir noticias de Twitter, Instagram y Facebook. Es muy importante para estar al día de las novedades en moda y cosmética. Me gusta estar al corriente, pero no sigo las tendencias.

11- ¿Qué es lo más extravagante que ha hecho hasta hoy?

Enviar a toda mi familia, incluyendo a mis sobrinos y sobrinas, a la Universidad en EE.UU. Creo firmemente en el poder de la educación.

12- ¿Cuál es el lado oscuro de su fama?

Encontrar imágenes poco favorecedoras de mí en Internet.

13- ¿Una virtud secreta?

Puedo leer a las personas, su cuerpo y sus emociones. Por eso e cuando voy a entrevistar a alguien nunca miro antes su CV, prefiero intentar entender como es como persona. Lo más importante es conectar.

14- Un momento de felicidad plena

Cuando nacieron mis tres hijos.

15- Y… ¿ese momento que borraría de su vida?

Ninguno. He aprendido de mis errores y de mis experiencias pasadas. Creo que es fundamental centrarse en el presente en lugar de anclarse en el pasado.

16- ¿Ha tenido que comerse a menudo sus propias palabras?

Sí, pero como he dicho es necesario para aprender de los errores.

17- Dígame un nombre . ¿Por qué lo ha elegido?

Duke, el nombre de mi hijo pequeño. Los dos mayores se han independizado pero él sigue viviendo con su padre y conmigo.

18- ¿Qué súper poder le gustaría tener?

Volver atrás en el tiempo para disfrutar otra vez de cuando mis hijos eran bebés.

19- ¿Un epitafio?

No pidas permiso.

Mi veredicto. Es maravillosa. Obvia con naturalidad las preguntas que no le interesan y contesta con sinceridad el resto. Me hace gracia. Que sea el primer personaje que no quiera protagonizar una noticia pero si conocer a otro personaje. Comparto. Su visión de la mujer y su amor a la familia. Pagaría. Porque me enseñará a maquillarme y así jugar con sus productos el día que mi hija deje de robármelos. Entiendo. Su pregunta más ridícula. Sonrío. Con el lado oscuro de su fama y con esos centímetros que le faltan. Ratifico. Su virtud secreta. Y comparto. Su momento de felicidad plena y su súper poder. Yo también añoro la infancia de mis hijos. Y, como dice su epitafio, no pido permiso. Para decir que es la «suegra» perfecta y amante esposa. De un hombre, por cierto, que es un cañón.