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Cómo aumentar la productividad de tu negocio online

¿Alguna vez escuchaste el famoso dicho que dice “nunca dejes para mañana lo que podés hacer hoy”? Ir en contra de esta máxima, es lo que se llama procrastinación y sus resultados son igual de molestos que la palabra misma.

Sofia Stavrou – Content Strategist en Tienda Nube– comparte las claves para encontrar metodologías de trabajo más activas y productivas a través del testimonio y voz experta de Lucia Petrelli –People Operations de Tienda Nube-.

Primero lo primero ¿Qué significa procrastinar?

Procrastinar es una palabra de origen latín (pro, adelante y crastinus, referente al futuro) y consiste en retrasar actividades o situaciones importantes, reemplazándolas por otras menos relevantes.

El concepto abarca, generalmente, al sentido de ansiedad generado ante una tarea pendiente sin tener la fuerza de voluntad necesaria para concluirla. El acto que se pospone puede ser percibido como agotador, desafiante, inquietante, peligroso, difícil, o aburrido. Todas estas visiones terminan generando estrés, por lo cual uno mismo se autojustifica posponerlo a un futuro incierto y sigue generando un círculo vicioso de ansiedad por no ver la tarea realizada.

¿Cómo evitar la procrastinación? El testimonio de Tienda Nube

Con un equipo a cargo o estando solo y al frente de un ecommerce, es importante encontrar la metodología de trabajo más activa y productiva posible para obtener los mejores resultados a corto y largo plazo.

Para ayudar a lograrlo, la People Operations de Tienda Nube, Lucía Petrelli, comenta el caso de Tienda Nube. “Nuestra forma de trabajo gira en torno a lo que queremos como organización: ser excelentes en todo lo que hacemos y tener un impacto cada vez más grande en los emprendedores. Esto hace que todos los años nos pongamos objetivos agresivos que sólo podemos alcanzar si nuestra manera de trabajar está enfocada 100% en ellos”.

Y agrega, “no nos importa tanto cuánto tiempo la gente está en la oficina -de hecho muchas personas en Tienda Nube ¡no trabajan desde la oficina!-, sino lo que logra con su tiempo, el impacto que genera. Cada persona dentro de Tienda Nube tiene en claro cuáles son sus responsabilidades y cada quien asigna tiempo como cree conveniente. Sólo medimos nuestro éxito en base a lo que logramos. Esto está muy conectado a nuestro propósito como organización: ayudar a las personas a vivir una vida emprendedora”.

Claves para ponerse en acción

Reconocido el fenómeno, llega el momento de no posponer y entender las claves para ponerse en acción. En este sentido, Petrelli recomienda:

  • Planificar y ¡ponerse en acción!. Tanto en nuestro negocio online como en la

vida, cualquier proyecto que deseemos encarar consta siempre de dos partes; una de planificación y otra de acción. Planificar para evitar procrastinar, implica elegir unas pocas cosas que sean claves y nos lleven al éxito. Tener pocos focos nos va a permitir concentrarnos más fácilmente, ignorando todo lo que no son esos dos o tres focos, y hacerlos de manera excelente. Ahora bien, si los focos que elegimos son muy amplios, probablemente caigamos en la procrastinación de nuevo porque no tenemos en claro por dónde empezar o cómo atacarlos.

  • Transformar esa tarea u objetivo grande que nos intimida en una serie de tareas pequeñas, claras y manejables. Es decir, partir un gran “problema” en

varios más chicos y fáciles de trabajar. Luego, acomodar estas tareas en una línea de tiempo. De esa manera sé qué tarea hacer primero, cuándo empezar y para cuándo debería estar terminada.

  • Empezar con la primera tarea e iniciar el movimiento. En este momento

deberíamos deshacernos de cualquier tipo de distracción (celular, redes sociales, un ambiente ruidoso o lo que sea que represente una distracción para nosotros) y simplemente sentarnos a hacerlo.Cuando superamos esa barrera, lo que suele suceder es que, a medida que avanzamos y progresamos nos empezamos a entusiasmar con lo que estamos haciendo y, antes de darnos cuenta, el final de la línea de tiempo ¡está a la vista!

  • No agendar reuniones en la mitad del día, para que no corten la

productividad. Siempre es mejor agendar al comienzo o final del día o antes y después del almuerzo. De esa manera no tenemos que dejar de hacer algo en lo que estábamos concentrados para entrar en una reunión. Se estima que al cerebro le lleva alrededor de media hora para volver a concentrarse en algo después de una interrupción. En este caso las reuniones cuentan como interrupciones.

–          Estar atentos a cuáles son los momentos del día en los que somos más productivos o tenemos más facilidad para concentrarnos. Por ejemplo, para mí es a partir de las 5 pm, entonces suelo dejar esas horas para las tareas que más requieren que piense nuevas ideas, genere estrategias, etc; y dejo las tareas más operativas donde no tengo que pensar demasiado para ejecutar para el momento después de almorzar.

–         Tomarse breaks cortos para recargar energías, y hacer cosas que nos permitan volver a tener una mente fresca. Ya sea cambiar la yerba del mate o practicar 10 minutos de meditación (¡hay algunas meditaciones guiadas muy buenas en YouTube!) cualquiera de estas alternativas nos brindan un momento para recuperar energía y volver al trabajo con la mente liberada.

  • Trabajar en conjunto. Muchas veces, cuando me enfrento con algún problema o

algo nuevo, me sirve charlarlo informalmente con alguna persona de la oficina. Poner mis pensamientos y preocupaciones en voz alta hacen que gane más claridad en el tema y pueda destrabar la frustración para darle lugar a la creatividad y la eficiencia. Compartir con el equipo o con amigos o colegas es una buena práctica para avanzar considerando el punto de vista de otros cuando no pudimos dar fluidez a las tareas planeadas.

Entonces ¿Es posible vencer la procrastinación?

Petrelli, concluyó “Siempre que surge el tema de la procrastinación, pienso en la charla de TED “En la mente de un maestro procrastinador” de Tim Urban (escritor de Wait But Why). En esta charla, Urban habla sobre el cerebro del procrastinador y lo describe con una analogía muy divertida que incluye un “Instant Gratification Monkey”, un personaje de un mono animado que prioriza la diversión ante todo, al momento de sentarnos a trabajar en algo.

Algo en lo que coincido con Tim Urban es que no existen las personas que no procrastinan, simplemente hay personas con tendencias más grandes a procrastinar que otras y personas que generan mecanismos para lidiar con la procrastinación mejor que otras. No importa qué tanto “cerebro de procrastinador” alguien tenga, siempre se pueden hacer cosas para tomar control de la situación y vencer la procrastinación, si tenemos consciencia de eso”.

Periodista.Editora marcelafittipaldi.com.ar. Ex-editora Revista Claudia, Revista Telva España, Diario La Nación, Diario Perfil y revistas femeninas de la editorial

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