The Longines Avigation Watch Type A-7
23/07/2013
Fundada en 1832 en Saint-Imier, la casa relojera suiza se beneficia de una larga tradición, marcada por la elegancia de sus realizaciones. El The Longines Avigation Watch Type A-7 saca su inspiración de la extraordinaria historia de la marca y de su relación con el mundo de la aviación. Las calidades de rendimiento y de precisión, esenciales en este ámbito, sobresalen en este cronógrafo de excepción, dotado con un movimiento exclusivo monopulsador de rueda de pilares, especialmente desarrollado para Longines. Su diseño característico, acentuado por su talla imponente y su esfera desplazada, seduce a primera vista e ilustra la reputada maestría de la casa Longines.
El modelo que inspiró el The Longines Avigation Watch Type A-7 era un complejo concentrado de precisión y de exigencia. Hoy, Longines presenta esta pieza de excepción, que se inscribe en la prestigiosa herencia de la marca. Desde principios del siglo XX, Longines ha asociado su nombre al destino y al espíritu de los pioneros de la aviación, mujeres y hombres que desafiaron lo imposible y dejaron huella en la Historia. Ofreciendo precisión y alta calidad, los relojes Longines acompañaron a esos pilotos en sus hazañas. El The Longines Avigation Watch Type A-7 se inspira en modelos desarrollados en los años 30, que tenían que responder a criterios muy precisos de estética, de calidad y de precisión para satisfacer las exigencias de los pilotos y merecer la mención “Type A-7” otorgada por el ejército americano. Su gran talla y su corona estriada permitían una lectura y una manipulación rápida, hasta con guantes espesos. La esfera negra desplazada, con grandes números blancos, facilitaba la legibilidad en la penumbra o en las turbulencias. La orientación de la esfera estaba estudiada para que el reloj se llevase en la parte interior de la muñeca. La esfera se encontraba así en el mismo eje que los instrumentos de vuelo, lo que permitía a los pilotos leer las indicaciones sin mover el brazo ni soltar la palanca de mando. La elegancia del cronógrafo monopulsador The Longines Avigation Watch Type A-7 impresiona. Su caja de acero de 49 mm de diámetro aloja el calibre L788, movimiento de rueda de pilares desarrollado en exclusiva para Longines y que permite el control de las funciones del cronógrafo (arranque, parada, puesta a cero), presionando simplemente el monopulsador integrado en la corona estriada. La esfera negra desplazada de 50° hacia la derecha, que toma directamente su inspiración de los relojes llevados por los pilotos, así como los grandes números árabes blancos, confieren a esta pieza de su estilo excepcional. La escala taquimétrica, en la parte exterior de la esfera, y las agujas “Breguet” de los minutos y de las horas complementan la destacada estética de este reloj, presentado con correa de piel de aligátor negra. Una tapa se abre sobre el fondo de zafiro del The Longines Avigation Watch Type A-7, dejando entrever los latidos de su movimiento.
Destacada en Saint-Imier, Suiza, desde 1832, la casa relojera Longines celebra, en 2012, 180 años ininterrumpidos de maestría relojera. La marca se beneficia de una sólida experiencia deportiva como cronometrador oficial de numerosos campeonatos mundiales o como socio de federaciones internacionales. Renombrada por la elegancia de sus relojes, Longines es miembro del Swatch Group SA, primer fabricante mundial de productos relojeros. Utilizando un reloj de arena alado como emblema, la marca está implantada en más de 130 países.
Marcela Fittipaldi
Periodista.Editora marcelafittipaldi.com.ar. Ex-editora Revista Claudia, Revista Telva España, Diario La Nación, Diario Perfil y revistas femeninas de la editorial
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