Tamara Ecclestone, de boda

Tamara, hija de Bernie Ecclestone, magnate de la Fórmula Uno, se casó el lunes día 1 de julio por lo civil en Londres después de tres semanas de resaca nupcial, que han trascurrido desde los festejos de la boda en la Riviera francesa al trámite administrativo al que sólo acudieron los novios y Petra, la hermana pequeña de Tamara, con su marido, James Stunt. Los cuerpos bronceados de Tamara, de 28 años, y su marido, Jay Rutland, de 31 años, salieron del Registro Civil del Ayuntamiento de Kensington y Chelsea, al suroeste de Londres tras oficializarse la unión matrimonial. En Londres el clima no invita a las gafas de sol, a llevar tirantes ni a tenderse al sol, pero a las herederas de la Fórmula Uno se les notaba que procedían del Mediterráneo o de otros lares.Los fastos de la boda de Tamara y Jay Rutland, a quien no se le conoce ni oficio ni beneficio, dieron que hablar y murmurar porquereunieron durante tres días a unos 150 invitados en el Gran Hotel de Cap Ferrat, cerca de Niza. El jefe de las carreras de coches tomó las 73 habitaciones y las dependencias del hotel para sus invitados. Aunque los novios no querían hacer público el programa de actuaciones y espectáculos para celebrar su matrimonio, algunos de los invitados no dejaban de transmitir con jocosos comentarios los fastos vía redes sociales

.Desde Elton John -que cantó al precio de más de un millón de euros- hasta la ausencia de las princesas Eugenia y Beatriz, que con su madre la duquesa de York eran esperadas al convite. La hospitalización del duque de Edimburgo, marido de la reina Isabel II, sirvió de razón o excusa para cancelar el viaje al bodorrio del año en la Costa Azul de Francia. Bernie o su esposa Slavica pagaron los siete millones de euros que costó casar a Tarama, un precio inferior al que se gastó Petra, la hermana pequeña.Comparado con los excesos para celebrar la boda, la unión civil de Tamara y Jay en el Registro Civil del barrio de Kensington y Chelsea de Londres, ha sido muy modesto dado que con unos 50 euros se tramitan los matrimonios. Un zapato de la novia o de su hermana Petra habrá costado más que la gestión administrativa en la sala (unos 50 euros) y los gastos de emitir un certificado matrimonial (5 euros). En esta ocasión no ha habido invitados indiscretos que filtraban a la prensa los chistes de mal gusto o cómo se ceñían los vestidos a los cuerpos sudorosos de los invitados a la ostentosa celebración del nuevo matrimonio.Lo que sí había el lunes en Londres era el destacamento de fotógrafos que iban a dejar constancia de que Tamara y Jay Rutland son marido y mujer ante la ley, no únicamente ante los medios, el cotilleo y la publicidad de la que se alimentan y alimenta a las hijas de Bernie Ecclestone. Petra y su marido, James Stunt, que también se casaron con ‘bodón’ en el Mediterráneo en 2011, fueron los únicos que recibieron a los nuevos esposados con unos manojos de confeti a la salida del Ayuntamiento en el sur de Londres.